16 Jun TARTA FILO CON RICOTTA, CALABACINES y PESTO de ESPINACAS
Esta Tarta de Ricotta con Calabacín y pesto de espinacas ha conquistado nuestro corazón. Siempre me han gustado las quiches, las cocas y las tartas saladas, son fantásticas para llevar a una cena, y cualquier porción que pueda quedar va directo dentro de un tupper y tengo una comida solucionada al día siguiente. Últimamente me ha dado por explorar recetas con esta masa y en todas las versiones me ha parecido fantástica, desde dulces hasta saladas. Me gusta el punto crujiente que tiene y en este caso, ha contrastado con un relleno de ricotta. Para hacer esta receta me he basado en una receta de Monica Pinto que tiene un blog que se llama Pratos e Travessas (absolutamente recomendable) Aunque he procurado ponerle mi sello personal.
La tarta original llevaba ricotta pero no huevos, yo se los he añadido por las razones que te cuento a continuación. En verdad, la Ricotta originaria de Italia es un queso que tiene una textura entre un queso fresco y un queso feta. Yo solo he conseguido ricotta de una marca comercial, y es mas blando incluso que un queso fresco tipo Burgos. Por este motivo, para garantizar que el relleno tuviera consistencia, he añadido 2 huevos.
Como te he contado en anteriores ocasiones siempre tengo algún tipo de pesto en la nevera, así que he pensado que un toque de pesto de espinacas y albahaca potenciaría los sabores de esta tarta. No me he equivocado. En cambio, no iba a añadir la raspadura de Limón que incorpora Monica en su receta, pero al final lo le hecho con un resultado espectacular. Parece mentira pero a veces una especia, un ingrediente en pequeña cantidad puede llegar a cambiar el sabor de toda una receta. No te olvides de la raspadura del limón. Es un Magic touch.(toque mágico)
Es una tarta muy muy suave al paladar y que seguro que gustará a todo el mundo. te dejo con la receta y con imágenes del proceso que te ayudarán a hacerla sin problemas.
INGREDIENTES:
Molde de 24-26 cm de diámetro. Raciones: 6/8 personas Tiempo aprox: 1 hora
- 6 hojas de pasta filo
- 60 g de mantequilla derretida
- 500 g de ricotta
- 1 calabacín mediano
- 2 huevos
- 5 cucharadas de pesto de espinacas (orientativo)
- raspadura de 1 limón
- 1 cucharada de semillas de amapola
- 2 cucharadas de perejil picado (opcional: Albahaca picada)
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
ELABORACIÓN:
Precalienta el horno a 185ºC
Mezcla la ricotta con la raspadura del limón y 2 huevos batidos. Salpimenta
Limpia el calabacín y corta a tiras delgadas. Si tienes mandolina hazlo con la mandolina, sino hazlo con un pelador de patatas,
Cubre el molde con 4 hojas de pasta filo (reserva 2 hojas), pincelando bien con mantequilla derretida entre una capa y otra. Este paso es importante para evitar que la masa se seque.
Cubre la masa con el pesto. Cubre con la mitad de la mezcla de ricotta y huevos. Encima añade el calabacín (yo no lo cocí pero puedes pasarlo 2 minutos por la paella con 2 cucharadas de aceite) y termina con la ricotta que te ha quedado. (fíjate en las fotos del paso a paso que te dejo)
Tira de las punta de la masa filo hacia el centro de la masa y cubre con las 2 últimas hojas de masa, arrugándolas con las manos. unta con mantequilla derretida.
Introduce la masa en el horno a altura media o baja y hornea durante 30 minutos. Yo no he cubierto la masa; no me ha hecho falta pero si ves que se tuesta demasiado rápido baja la temperatura un poco o sitúa la masa en la parte inferior del horno
Saca la tarta del horno y espolvorea con semillas de amapola y perejil o albahaca picados.
Si la haces me gustaría saber si te ha guatado.
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